El gobierno intensificó la vigilancia en las principales rutas de carga ante el creciente poder del crimen organizado, mientras un grupo de funcionarios y directivos, encabezado por la Secretaría de Gobernación, en colaboración con la Canacar, está trabajando para encontrar soluciones, aunque se reconoce la complejidad del desafío y la falta de soluciones fáciles, incluso con el despliegue de la Guardia Nacional.