El nearshoring, corriente en los negocios y narrativa utilizada desde hace tres años, cobra relevancia en México debido a la pandemia que propicia la evidencia de la lejanía de los fabricantes asiáticos de insumos diversos.
“Los problemas con las cadenas de suministros ocasionados por la pandemia y la proximidad de México con EE.UU., el mayor importador mundial, son algunos de los factores que favorecen el nearshoring en México”, consideró Brian Rodríguez, analista de Monex.
Con el nearshoring se espera acercar los centros de producción tercerizada y con la estrategia de externalización por la que una empresa transfiere parte de su producción, localizados en destinos cercanos y con una zona horaria semejante.
México por su ubicación geográfica, tiene grandes ventajas competitivas en los clústeres industriales y su frontera con el vecino país del norte.
El analista expuso que, con el nearshoring, se ha atraído inversiones a la frontera norte de México, también a El Bajío, principalmente con empresas del sector automotriz.
“Pronosticamos un aumento de la demanda de espacios de 4.2% para el norte del país, 3.5% para El Bajío y 2.7% para el centro”, dijo Rodríguez.
Agregó que, en la última década, el Área Bruta Rentable de esta división inmobiliaria ha presentado una tasa compuesta anual de crecimiento de 10.2%, cifra que además incluye una absorción favorable en las regiones del norte, Bajío y centro.
Anticipó mejores niveles de demanda y ocupación en los parques y naves industriales, porque las actividades productivas se encuentran geográficamente distribuidas en manufacturas en el norte de la República Mexicana.
Mientras que los principales centros industriales son Tijuana, Cd Juárez, Monterrey, San Luis Potosí, Querétaro, Puebla, Aguascalientes, Guanajuato, Guadalajara y el Valle de México.
Brian Rodríguez indicó que esta narrativa de negocios surge como respuesta al offshoring, pues logra la deslocalización que hace una empresa cuando trasladó sus fábricas o sistemas de producción a otro país, y tiene el objetivo de reducir los costos buscando proveedores en otros destinos, por lo general, en Asia.
“No cabe duda de que las largas distancias y la diferencia de horario entre los continentes muchas veces perjudican la cadena de suministros”, dijo.
“De manera puntual, el nearshoring en México considera el TLC 2.0 firmado en 2018 entre Estados Unidos y Canadá (una actualización del previo acuerdo trilateral), la mano de obra más competitiva en México contra China y otros competidores, así como el atractivo entorno mundial del comercio en línea”, puntualizó el especialista.
Sector aéreo
En el sector Aéreo es el que más se ha beneficiado del nearshoring, destacando los siguientes aspectos: como la conectividad con los países aliados del T-MEC (EUA y Canadá), ya que son las rutas más transitadas hacia/desde México; contando la Red de Comercio Libre de México, la cual cuenta con una capacidad de acceso preferencial a 50 países.
Además, de los Bajos Costos de Transporte en México respecto a otras economías avanzadas, ya que la Tarifa Aérea promedio local por kilómetro resulta inferior vs otros países en la región norteamericana, así como el Plan Maestro de Desarrollo (PMD) de los Grupos Aeroportuarios, los cuales a través de un intensivo plan de inversiones han logrado cubrir la demanda del Nearshoring y apoyar a la saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
El Tráfico de Pasajeros de la región Norte, Bajío y Centro ha presentado un crecimiento promedio de 26.4%. Visto de una manera particular y atendiendo a los estados con mayor presencia del Nearshoring, la región del Norte, Bajío y Centro han reportado un incremento de 28.6%, 27.0% y 22.7% respectivamente.
Edna Herrera